Lo más divertido de estos espacios, resulta de la variedad de vidas que llevamos cada una.
Habemos: una casada sin hijos pero feliz, una casada que fue muy feliz, con 3 hijos pero con ganas de que su marido se arme el bolsito, una soltera con amante joven, una divorciada con novio separado pero con 2 hijas y una separada-amargadísima por el abandono de su ex y con los 2 hijos varones totalmente a su cargo.
Son tan disímiles las experiencias que podemos compartir que bien podríamos protagonizar una de esas obras de teatro tan aficionadas a reflejar la supuesta alma femenina.
Lo cierto es que nosotras nos reímos a morir, a veces con mucho dolor por lo de cada quien y con buena escucha, pero siempre con un humor desopilante. Son reuniones catárticas, de las que salimos fortalecidas, comprendidas y apachuchadas en el afecto genuino que circula entre nosotras.
Promediando el encuentro apareció este chiste cruel y algo ¿machista? que yo había escuchado la radio la tarde anterior y que me había hecho reír a carcajadas:
Al juntarse nuevamente empieza a contar su experiencia amorosa la que tenía amante:
"A mí me fue genial, ni bien me vio, se me tiró encima y nos amamos toda la noche. Fue muy divertido!".
Después fue el turno de la que tenía novio:
" A mí me dio un poco de vergüenza, así que me quité la capa y me puse un piloto. Cuando llegó, le pareció raro que estuviera con piloto dentro de casa, así que me pidió que me lo quitara y - cuando me vio -se puso como loco. Estuvimos juntos un montón de horas amándonos. Fue genial!"
Cuando fue el turno de la casada, un poco abatida contó:
" Bueno, el gordo llegó bastante tarde a casa, igual yo lo esperé en la puerta de la cocina como ustedes me dijeron, pero ni bien me vio me dijo :
- "Qué hacés Batman, ¿qué hiciste para comer?"
Besotes a todas, brindo por mis amigas y por todas ustedes, a quienes ojalá les haya provocado una sonrisa.