Y sí, todo termina al fin...y este viaje no es la excepción.
Hemos sido felices. Seguimos amando el NOA, la humanidad de sus gentes y los paisajes soberbios tan sabiamente engamados . El respeto, el silencio, los colores y sabores. Seguimos siendo fieles devotos de esta parte del país, la más bella para nosotros. A pesar del avasallamiento del hombre inescrupuloso que va detrás de sus ganancias destruyendo lo identitario de la región hay lugareños resistiendo como hace más de 500 años contra la codicia del blanco. Hay NOA para rato!
Y colorín colorado, este viaje por la hermosa Argentina se ha terminado.
Marian, qué hermosos todos tus posts sobre nuestro querido y hermoso Noroeste! Cuánta belleza, color, aromas, sabor, amor, naturaleza, paisajes, gente, etc... ¡Cuánta vida!
ResponderEliminarEspectaculares tus fotos, por Dios!
Gracias por compartirlo!
Beso enorme,
Ana