martes, 4 de agosto de 2020

SETENIL DE LAS BODEGAS- ENERO 2019

Leí una vez que Setenil de las Bodegas nació bajo las rocas y esa frase quedó grabada en mi memoria viajera y, cuando, se juntaron el dónde y el cuándo, allá nos fuimos a comprobarlo. Los caminos por la Sierra de Cádiz es en sí un viajazo precioso.


"Gracias a pueblos como Setenil de las Bodegas, la Sierra de Cádiz puede presumir de ser una de las más bonitas y pintorescas de toda la península ibérica. Quizá sus primeros vecinos prehistóricos esto aún no lo podían saber, pero desde luego sí tuvieron claro que este lugar era idóneo para asentarse y hacerlo perdurar a lo largo de la historia.

Setenil de las Bodegas forma parte de la ruta de los Pueblos Blancos de la Sierra de Cádiz, y nació aprovechando las formas del cañón creado por el río Guadalporcún y sus cuevas y recovecos naturales no tardaron en dar cobijo a sus primeros pobladores. Más tarde pasaron a ser casas, y así hasta hoy, cuando se ha convertido en uno de los pueblos más visitados de la provincia gaditana". 

                 



Es de agradecer, la temperatura de toda la zona gaditana en pleno invierno. Si es tu única posibilidad de visitar esta zona en esta época del año, ni lo dudes.


Es una experiencia singular, tener la piedra, la roca de la sierra ahí, casi a la mano, pero de techo del pueblo.


Y con el curso del río, ahí, a tiro de piedra, nunca mejor dicho.



Veníamos de Grazalema y llegamos para la hora del almuerzo, así que caminamos hasta el último de los lugarcitos que tenía un perfume a comida sabrosa muy tentador. Y lo agendamos para después del recorrido. Veníamos con la data de que en este pueblo los tomates son muy famosos y bien les vale esa fama, porque tienen sabor a tomate, cosa que es de agradecer. Lo mismo con el queso Payoyo, un queso de cabra propio de la Sierra gaditana. Así que nos reservamos esos descubrimientos para el momento de hacer un alto y almorzar.







Cambio de planes...a comer!









Todo, riquísimo, riquísimo!!! Qué deleite, por favor!





                                         






Amo el lado B de los lugares, esos que te muestran cotidianeidad en medio de lugares turísticos.







Y nos vamos cantando bajito, llenos los ojos y el alma de un lugar tan singular. 
Ojalá te haya parecido atractivo, lo suficiente para conocer en persona algún día. 
Abrazo viajero y que estemos bien!



2 comentarios:

  1. Es tan lindo ese pueblito!! Nosotros fuimos a la mañana bien temprano, ni bien levantados, cosa de desayunar ahi. Estaba lloviendo mucho porque como te conté la lluvia nos acompañó bastante en ese viaje. Así que no había nadie a esa hora!! Practicamente que teniamos el pueblo para nosotros solos. Fuimos a desayunar a ese Bar Frasquito que se ve en tus fotos, algunas de sus paredes eran la roca directamente. Los pocos clientes que había eran todos locales, se saludaban.. creo que eramos los unicos turistas ese día.
    Es un pueblo muy pintoresco, la verdad es que vale la pena ponerlo en el itinerario. beso

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    1. Qué lindo, cuando podemos conocer los lugares sin que estén atiborrados de gente. Es lo que más me gusta de ir contra la corriente...jaja! Besotes!

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