Casi toda Roma en un solo día.1° parte

Si nos compartimos en Instagram ya sabrás que en este mismo momento estamos con  el Vasco en Mar de las Pampas, un balneario de la costa atlántica argentina.

A mí el mar me gusta en invierno. Sobretodo en lugares como este, que aunque muy extendido a nivel construcción edilicia, sigue siendo un pueblo sin asfalto, sin edificios altos. Sólo serán unos pocos días,  que ya te contaré más y mejor más adelante. Ahora, lo prometido, sigamos callejeando por Roma.

Si te vas a sumar a este recorrido, te recomiendo calzado cómodo, comodísimo porque la caminata de hoy será tremenda.

Salimos de casa...

Y hoy nos encaminamos hacia la Gallería Alberto Sordi. Es un día precioso! Cómo nos debía Roma días como estos. En los últimos viajes, nos han tocado muchos días de lluvia. Así que con este día de sol pleno, tocó BINGO!

Atravesamos la Galerría y salimos a Vía del Corso.

Caminamos por toda esta arteria comercial hasta llegar a la Piazza del Popolo.( 1, 6 km)  Hacemos un alto y disfrutamos de ver a la gente en plan cotidiano. Las iglesias gemelas tan populares de esta piazza están cubiertas por andamios. Ufa!

Disfrutamos como niños de la magia de las burbujas gigantes. Hacemos un alto. Miramos a la gente local. No paramos de disfrutar. Nótese la elegancia del señor en bicicleta.

Y el caballero de sombrero?

Qué hermoso!

Vamos en la misma dirección. Nos cruzamos del otro lado. El menos turístico. El más cotidiano.

 

Siguiendo a esta pareja, pensamos cruzar el Teber a la altura de Piazza del Popolo. Y ya del otro lado, a media mañana la vida nos regaló un estupendo desubrimiento que aterosaré por siempre. No puedo dejar de compartirlo. Te gusta el helado? Pues a mí en todos los viajes anteriores el helado italiano ni de aquí, ni de Florencia, ni de Venecia ni de ninguna otra ciudad italiana me había gustado. Sin embargo, el azar me premió y a pesar de ser un horario impropio, entramos y qué sorpresa para dos diletantes gourmet. Al cruzar esta plaza, te espera GELATERIA LA ROMANA. ( desde Piazza del Popolo 600 mts)

Entrá por favor, entrá! Cero turísticas como las otras que se atibrran cerca de la Fontana di Trevi.. Acá la producción es cosa seria.

Todos los gustos eran realmente deliciosos y taaaan cremosos.

Así que... hubo ballotage

Salimos satisfechos y felices.

Sin rumbo, lo único que sabíamos era que queríamos terminar el recorrido  en el Trastevere.
Caminamos por Vía Cola di Renzo, otra arteria comercial. En esta zona no se ven turistas.

Cuando llegamos a esta zona recordamos que en otro viaje ya habíamos andado por aquí y que habíamos almorzado en un lugarcito delicioso. Nos metemos por las callecitas para ver si damos con el lugar.

Y sí, nunca olvido una calle. Allí estaba. Pero seguimos caminando.

Hasta que dejándonos perder llegamos al Vaticano ( 2 km más). Qué suerte que ya lo habíamos visitado en el primer viaje, porque estaba lleno de gente.

Las colas de gente que se veían para entrar eran larguísimas. Eso en invierno no pasa.  Una de las ventajas de viajar cuando hace frío. Igual no se compara con tener esta luz hermosa.

Una Ferrari. Para el Vasco, irresistible!

Hoy caminamos muchísimooooo. Ahora sí, nos encaminamos      ( 1, 8 km)  hacia el Trastevere a almorzar. Pero eso te lo cuento más adelante. Abrazo grande ! Hasta el miércoles!