sábado, 28 de abril de 2012

Noche entre amigas

Cada 3 meses, más o menos, nos juntamos, generalmente en casa un grupete de amigas de la infancia ( escuela primaria-secundaria juntas- una primera juventud sabiéndonos y después unos 10 años de casi nada, hasta que hará unos 5 o 6 nos volvimos a juntar y fue muy, pero muy nutritivo ese reencuentro).
Lo más divertido de estos espacios, resulta de la variedad de vidas que llevamos cada una.
Habemos: una casada sin hijos pero feliz, una casada que fue muy feliz, con 3 hijos pero con ganas de que su marido se arme el bolsito, una soltera con amante joven, una divorciada con novio separado pero con 2 hijas y una separada-amargadísima por el abandono de su ex y con los 2 hijos varones totalmente a su cargo.


Son tan disímiles las experiencias que podemos compartir que bien podríamos protagonizar una de esas obras de teatro tan aficionadas a reflejar la supuesta alma femenina.
Lo cierto es que nosotras nos reímos a morir, a veces con mucho dolor por lo de cada quien y con buena escucha, pero siempre con un humor desopilante. Son reuniones catárticas, de las que salimos fortalecidas, comprendidas y  apachuchadas en el afecto genuino que circula entre nosotras.
Promediando el encuentro apareció este chiste cruel y algo ¿machista? que yo había escuchado la radio la tarde anterior y que me había hecho reír a carcajadas:

Se juntan 3 amigas: una con novio, otra con amante y otra casada . Entre otros temas, salen  las experiencias amorosas que tenían con sus parejas, entonces les parece divertido ponerse de acuerdo en usar esa misma noche, un mismo look : botas de caña alta de cuero negro, un body de cuero negro, un antifaz negro y una capa también negra  y  así, contarse la experiencia al otro día.
Al juntarse nuevamente empieza a contar su experiencia amorosa la que tenía amante:
"A mí me fue genial, ni bien me vio, se me tiró encima y nos amamos toda la noche. Fue muy divertido!".
Después fue el turno de la que tenía novio:
" A mí me dio un poco de vergüenza, así que me quité la capa y me puse un piloto. Cuando llegó, le pareció raro que estuviera con piloto dentro de casa, así que me pidió que me lo quitara y - cuando me vio -se puso como loco. Estuvimos juntos un montón de horas amándonos. Fue genial!"
Cuando fue el turno de la casada, un poco abatida contó:
" Bueno, el gordo llegó bastante tarde a casa, igual yo lo esperé en la puerta de la cocina como ustedes me dijeron, pero ni bien me vio me dijo :
                                                        - "Qué hacés Batman, ¿qué hiciste para comer?"


Besotes a todas, brindo por mis amigas y por todas ustedes, a quienes ojalá les haya provocado una sonrisa.

sábado, 21 de abril de 2012

Jacarandá para dos.


   Del otro lado de su vida cotidiana, el jacarandá se desprendía lento de sus flores con parsimoniosa cadencia, como si sólo estuviera allí de marco cinematográfico para el reencuentro de estos dos tristes grandes.
  La única música que sonaba era el lento traqueteo del ómnibus Cot, por la General Flores charrúa.
Y allí estaban. Él y ella.
  El temblor involuntario de su brazo izquierdo era muy notorio. Ella se dio cuenta y  quiso saber.
Él, que estoy enfermo, que no te lo había dicho?, que te quedes tranquila, que estoy bien. 
Ella lagrimeó suavecito.
   Su mano con pecas, se dejó acariciar por la de ella, amorosa y final.
   Apareció el miedo y la nunca imagen de la muerte para esta historia de tanto y muy mucho.
 Antes la ausencia que no pesa.
  Él, que todavía te quiero, y claro, que nunca pude otra cosa. Acaso no lo ves. Eso nunca va a cambiar.
Y ella, por fin pudo hablar. Por fin dio cuenta de esa carta a la  que nunca se le animó. Por fin habló para ser escuchada, por fin, por suerte, por ella, por él.
  Los abrazos fueron tres. Los tres intensos, vivos, fuertes, dolorosos, de adiós, de porqué,  de porqué todo es como es, de ya nada será , de quedémonos así. De sí y de no.
Las manos entre los cabellos y el amor entre las manos.
Y él con el deseo intacto de llevársela a su piel, balconeándole  sus pupilas almendradas.
  Que te cuides. No te vayas a morir,por favor. Y hubo sonrisas y lágrimas.
   Ella bajó los 5 escalones de la esquina prometiéndose no dar vuelta la cabeza, aunque al final, miró. 
Él siguió ahí inmóvil, como siempre y como nunca.
El jacarandá también.




(Las fotografías pertenecen a Google imáegenes)

lunes, 16 de abril de 2012

Desafío Blad: Mi espacio de trabajo en casa.

Bueno, me uno al desafío Blad. Este es mi espacio de trabajo, es una mesa de carpintero que -por suerte- según las necesidades puedo ampliar. Me gusta porque es un espacio muy luminoso y me encanta aprovechar esa luz natural o - cuando llueve- estar ahi " trabajando" viendo la lluvia caer
Soy docente, así que es un espacio multiuso!.
Pero


Esta es la elegida!



















sábado, 14 de abril de 2012

Che, flores, ¡llegó el otoño!

Me encanta estar en casa una noche como esta. Hasta hace un ratito dormimos tremenda siesta. Y ahora el Vasco toma unos mates mientras disfruta de una película ( de las de él: tiros, tañú-tañú y cocha golda) y yo no le rompo con nada.
Anoche, cada uno tuvo salida con amigos. Yo a casa de mi superamigahermana:de ahora en más la Chudi donde nos reuniríamos con Sodita, mi otra hermana de la vida. Faltó a la cita La Pilo, la 4º del grupete íntimo porque se está mudando. Noche de chicas, chusmerío, desahogo, compartir lo de cada una, bromear, mirar una peli y pasarlo bien, relajadas.
Vasco salió con su hermanoamigo y también volvió contento.Y como dice mi suegro, "Noches alegres, mañanas tristes". Hoy arrancar fue durísimooooo. Pero teníamos varias cositas que nos esperaban fuera de casa. Así que anduvimos por ahí, almorzamos en el bodegón donde solemos hacerlo los sábados y quiso la suerte que volviera a coincidir con mi hermano.Así que disfruté mucho de mi sobri Catalina que va a cumplir 3 pirulines muy prontito. Por acá llueve, poquito, pero alcanza para crear clima.
Ahora aprovecho y me siento frente a la compu de mi escritorio a dejarme andar por los blogs y demás yerbas interneteriles. Hoy va a preparar la cena el Vasco. Me había invitado a salir, pero como la tarde pintaba muy desapacible, preferí que lo pasáramos en casa, tranquis.Así que mi chef preferido, cuando tenga ganas, va a comenzar la danza más bella que se pueda dar en nuestra linda cocina.
Buscando fotos para subir a algunas propuestas de los blogs amigos, encontré estas  que saqué una mañana durante el otoño pasado en un pueblito de Entre Ríos. Además de parecerme muy bellas, reflexioné que justamente las habíamos sacado ya casi llegando a mayo, y pensé en los caprichos de la naturaleza, de su tozudez y maravilla.
Estas flores que encontramos en un pueblito cercano llamado Liebig , que es digno de protagonizar otro post.













No son preciosas? Capaz que nadie les había avisado de la llegada del otoño...qué suerte , no?
Que pasen linda noche de sábado y buen domingo! Ah y gracias por estar ahí, conmigo!

miércoles, 11 de abril de 2012

LIsboa, una ciudad para conocer.

Lisboa tiene una luz, un encanto, una gente, una música, una de todo y más de una.
Qué suerte que nos decidimos a ir.
Muchos nos desalentaban. Lisboa? Les parece?
Muy vieja, muy descuidada, mucha pobreza...
Siempre había sido una fantasía para mí. Será por el idioma y la enorme influencia portuesa en la edificación, cultura e idioma de Brasil, en su música mara
villosa.
"¿¿¿¿Lisboa???No tiene nada...no da para ir"
Por un momento temí por nuestra suerte y por la escasa expectativa que el vasco estaba demostrando por esta nueva ciudad para nuestros ojos y para nuestra alma.
Sin embargo, llegar a Lisboa y vivir una enorme alegría en mi alma de valija, fue todo uno.

Antigua, vieja? Y sí, qué ciudad no lo es en Europa.
Amamos esas ciudades que nos hablan de otro tiempo y Lisboa es una enorme representante de esta cualidad.


No se snetarian a comer algo en este lugar???? Díganme que sí, porfi!



No se mueren de amor por esta veredita?


Y a la vuelta de cualquier esquina, la ropita al sol.


Atardecer en la plaza de Pombal.


Fuimos a escuchar fado, pero un lugar nada turísitco. Una tasca llamada, Tasca do Chico en el barrio Alto, donde gente muy mayor, van a tomar algo y se ponen a cantar espontáneamente . El lugar es muy pequeño y se llena a rabiar.
Un verdadero clima de la música más nostalgiosa, triste y bella que se puede apreciar.






¿Cómo no probar la ginjinha?


Y el bacalao en todas sus formas posibles!


También tiene su contraste...


y los mejores metros de toda Europa!Limpieza, comodidad y rapidez.
















Otro día les cuento más. Nosotros vinimos enamorados de Lisboa. 
Si alguno tiene la oportunidad de viajar y están dudando si incluirla o no, no se la pierdan.