La forma más bella de llegar a la Ribeira. Ruas das Aldas Y Pena Ventosa. Oporto

En el post anteior pasamos delante de la catedral ( siglo XII-XIII) y seguimos camino abajo pensando que llegaríamos a la Ribeira. Como ya viste, no fue así.

No teníamos intención de conocerla por dentro, pero era atractiva a la vista toda esta zona monumental. Así que nos encaminamos para acercarnos.

Y qué suerte que nuestro olfato viajero no nos falla. Así a tientas y a locas, dimos con un lugar precioso que no dejaría de depararnos sorpresas.

Por el lateral derecho vimos que se abría  un solar, allí fuimos y dimos con un edificio precioso que resultó ser el claustro de la catedral, con el cabildo y el pelourinho.

Este palo de estilo manuelino nunca se usó para el fin con que eran creados estos pelourinhos. Colgar a los criminales a la vista de todo el pueblo. En Oporto sólo fue desde siempre decorativo.

La Catedral.

El Claustro

En primer plano el Pelourinho.

El Cabildo.

Este solar es un punto clave para tomar fotografías de Oporto, ya que se encuentra en la parte alta de la ciudad. ¿Parte alta? Pero si nosotros no dejamos de descender para llegar a ella. Bueno, así de desconcertante es - urbanísticamente hablando- la ciudad.Después descubrimos que desde nuestro hotel según doblaras a la derecha o a la izquierda, irías camino arriba o camino abajo.

Y allí estaban ellas...sentaditas al abrigo del solcito de enero.

Desde un costadito se ve el río. Así que vamos a intentar llegar por este lado ahora, camino abajo otra vez.

No sabemos bien por dónde. Pero nos ponemos a andar.

Vamos bien..más cerquita de ella.

Ah bueno...empieza a abrirse paso ante nosotros un ensortijado caminito totalmente peatonal. Estas calles te hablan de medioevo. Es que al volver y ponernos a invetigar por dónde anduvimos, nos enteramos de que se trata del cetnro histórico de Oporto, Patromonio Mundial de la Unesco. Las calles Rua das Adas y Pena Ventosa, son las más antiguas de la ciudad, por donde lo peregrinos que parten de Portugal hacen su camino rumbo a Santiago de Compostela

Y ya quisiera quedarme por acá. No puedo creer la suerte que tenemos.

La bajada es cada vez más pronunciada. Solo nos cruzamos con una pareja .No parecería ser la ruta más conocida para llegar a la Ribeira. Sin embargo y sin duda alguna la más recomendable por lejos.

Nos sentimos unos "adelantados", en el sentido histórico de la palabra. ( qué ingenuos).

Y seguimos felices cuesta abajo. ( más felices que Carlos Gardel...)

"Sabía

que en el mundo no cabía

toda la humilde alegría

de mi pobre corazón.

Ahora

cuesta abajo en mi rodada..."

No es una postal preciosa, que dice tanto del lugar? Acá sus moradores, viven!

Seguimos camino abajo entre las casas más entrañables del mundo.

Y después de tanto bajar y bajar, doblar a diestra y siniestra...se adivina el río a muy poca distancia ya.

Lo que viene ahora es realmente una fiesta. Pero ya por hoy fue suficiente. El viernes, te muestro la Ribeira como yo la viví.

La recompensa de dejarnos perder por las callecitas, siempre es el tesoro más codiciado. Quizás podríamos haber hecho el mismo camino de haber hecho los deberes y llevar la data desde acá. Este viaje no fue demasiado planeado. Fue más bien, un dejarme llevar. Y por eso mismo creo que el Universo me premió. Pero si tenés pensado viajar a Oporto 

( Patri y Román, teléfono para Gesell) , porfa no lo dejen pasar.

Que estés bien y disfrutando de este tiempo pascual , para algunos de mucha religiosidad, para otros de puro y simple descanso, para otros la oportunidad de hacerse un viajecito y para otro con un poco de todo lo anterior o de nada y todo lo contrario. Como sea que lo pases, a ser lo más dichosos posibles. Que hace poquito hubo quien me aseguró que la vida es sólo un soplo.