miércoles, 5 de abril de 2017

De compras por los Clérigos, en Oporto.

Conocer la librería Lello e Irmaos que les mostré en el post anterior, nos había colmado la mañana. Al salir de allí no nos imaginábamos que nos esperaría un barrio realmente encantador. Es que Oporto no deja de sorprender. 


Quizás andás dos cuadras de los más despobladas y a simple vista abandonadísimas, y de pronto la tercera es de lo más trendy. Qué se yo, quizás por esas mismas contradicciones es que es una ciudad que no te deja indiferente y te va regalando sorpresas y suspiros de puro amor.
Nosotros nos sentimos inmensamente felices de haberla elegido. 



 Y una de las más gratas sorpresas nos la dio esta casa A Vida Portuguesa. No pases de largo, así sea que andás medio a los apurones por la ciudad. No te la pierdas!




A Vida Portuguesa vale la pena no sólo porque dentro te encontrarás con cositas de diseño amorosientas, productos gastronómicos portugueses q sino porque en sí el edificio es de es esos que te hacen pensar en que suertudos los que heredaron esa casa de fines del siglo XIX.


No me digas que ya el salón no es pura belleza antigua.




Cuando vi esta estantería, pisos y escalera ...tooooodo de madera, casi me echo a llorar de la emoción.









Al salir te das cuenta de que estuviste en el lugar indicado.


 Pero el barrio no termina allí.


Y andando y andando te encontrarás con más lugares encantadores como este...


Las sardinas en sus más variadas y enloquecedoramente atractivas latitas, te aseguro que son una excelente opción para traerte a casa o para regalar.


No me digas que este packaging no es lo más de lo más...? Sigamos caminando que hay otros negocios tan modernamente antiguos como este...


Y otros con vidrieras como esta...


O barberías tan chic como esta...


Es que andar por los Clérigos tiene mucho encanto.







Pero bueno se nos hizo bastante más que el mediodía y nos habían recomendado un lugar para probar el plato más típico de Oporto: la francesinha. Y allí nos metimos. Qué error!!!


Nosotros no lo vamos a recomendar, no porque no estuviera bien hecho el plato en cuestión o porque no nos hayan tratado correctamente, es que a nosotros este sandwich con "de todo", no nos gustó ni un poco. Ese juguito, tipo salsita con la que lo riegan y ahogan no nos supo nada bien.




Lo mío fue un "simple" tostado con jamón y queso a la francesinha porque no me fiaba del sandwich tradicional, pero caí en la trampa y no salí nada contenta. Pero, como dicen los españoles, "para gusto los colores."


Decidimos subir la cuesta y seguir recorriendo la zona, Todavía había mucho, mucho por descubrir.


Alguna vez te pasó de viajar y probar un plato típico y no saber cómo pasar el segundo bocado? Bueno, el viernes seguimos con más. Que estén bien, que muy bien!

7 comentarios:

  1. Caminamos por las mismas vereds y os eamoramos de los mismos lugares pero no commos lo mismo! jajaja Edu odia el queso asi que la Francesinha no fué una opci♀n para él y yo aproveché para comer cosas que no comía desde chica:coixinhas y mucho quindim!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Qué linda Marce!! No es una zona hermosa, hermosa de Oporto? Es que realemente sorprende esta ciudad. Besotes

      Eliminar
  2. Comi en el mismo lugar, pero lo mio fue mas tradicional, un sandwich común y luego algo dulce que ahora no recuerdo que era..

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estuviste más acertada, Adri! Es que nosotros somos curiosos gastronómicamente hablando y nos gusta mucho probar lo típico de cada lugar que visitamos. Pero ese plato, decididamente no estará dentro de nuestros favotiros..jajaj!

      Eliminar
  3. Comi en el mismo lugar, pero lo mio fue mas tradicional, un sandwich común y luego algo dulce que ahora no recuerdo que era..

    ResponderEliminar
  4. Definitivamente no voy a probar la francesinha, pero si voy a seguir tu recorrido tal cual!! Divinas tiendas!

    ResponderEliminar

Y ¿qué te pareció?.Gracias por pasarte y alimentar este espacio. Si es con buena onda, muchísimo mejor.